Respuesta al post anterior

Ahora me toca a mí. La cara femenina del blog da su respuesta...
Este cuchitril es mi debilidad. Cuando Carlos me invitó a compartirlo, sentí un poco de temor y mucha responsabilidad, yo solo estaba acostumbrada a leerlo y disfrutar de sus aventuras pero desde el lado del espectador y luego verme del otro lado me asustó un poco.

Con el correr de los meses me fui acostumbrando y he llegado a compenetrarme tanto que ya no me puedo despegar de aquí.
Gracias a esto, he tenido la oportunidad de acceder a personas maravillosas que de otro modo nunca hubiera llegado a conocer, todos ustedes nuestros fieles lectores, quienes se han ganado un lugarcito especial en mi corazón...

Sinceramente yo me encontraba en mi peor momento, hacía apenas unos meses había perdido a mi hermana gemela.
Siempre sentí a Carlos como mi hermano trillizo, solo creo que la cigüeña se equivocó y lo llevó a él a Ecuador y a nosotras nos trajo para Argentina… pero con el correr del tiempo, hace apenas un año, la vida quiso que llegáramos a encontrarnos, ya con mucho camino recorrido y con mucha agua pasada bajo el puente.
Si de algo estoy segura, es que todo sucede a su debido tiempo, porque si nos hubiésemos cruzado unos años antes, nunca hubieramos llegado construir esta amistad tan especial.

Siendo dos personas totalmente diferentes, con pasados absolutamente dispares, coincidimos en un montón de cosas que llegan a sorprendernos.
Nosotros sí que somos el vivo testimonio de que existe la verdadera amistad entre el hombre y la mujer…
Nuestra hermandad no tiene fronteras...
Vos sabés que yo siempre estoy… y yo sé que vos siempre estás!!